01 -
Limpia un frasco de un litro usando agua caliente y jabón, y sécalo bien. Vierte 2 tazas de agua a temperatura normal, 2 cucharadas de jengibre picado y 2 cucharadas de azúcar. Mueve el jarro para disolver el azúcar, deja la tapa floja y ponlo en un lugar cálido lejos del sol.
02 -
Diariamente, añade 2 cucharadas de jengibre picado y 2 cucharadas de azúcar. Mezcla bien para que se disuelva, afloja la tapa y déjalo reposar otras 24 horas.
03 -
Cuela los pedazos de jengibre. El líquido restante es tu iniciador para crear sodas naturales.
04 -
Combina 1/4 de taza del iniciador con 4 tazas de líquido dulce con sabor. Llena una botella de tapa abatible, dejando un poco de aire. Permite que fermente de 1 a 3 días a temperatura ambiente.
05 -
Guárdalo refrigerado y aliméntalo una vez a la semana con 2 cucharadas de jengibre fresco, azúcar y agua. Antes de usarlo, deja que alcance temperatura ambiente.