01 -
Empieza precalentando el horno a unos agradables 175°C. Coloca moldes de papel en tu bandeja para 12 magdalenas o si lo prefieres, rocíala con un poco de aceite en spray.
02 -
En un bol grande, machaca bien los plátanos maduros hasta que queden suaves. Bate los huevos, la vainilla, la miel (o sirope de agave) y el yogur griego hasta que todo esté bien mezclado y con buena pinta.
03 -
Coge otro bol y combina la avena, harina de almendra, proteína, bicarbonato, levadura, canela y ese pellizco de sal hasta que todos los ingredientes se conozcan bien.
04 -
¡Aquí viene lo bueno! Incorpora poco a poco los ingredientes secos a tu mezcla húmeda. No olvides que hay que ir con suavidad, mezcla solo hasta que todo se una. Si te apetece algo especial, ahora es cuando puedes añadir chocolate, frutos secos o frutas secas.
05 -
Reparte la masa entre los moldes, llenando cada uno hasta 3/4 de su capacidad. Mételos en el horno ya caliente y déjalos unos 18-20 minutos. Sabrás que están listos cuando al pinchar el centro con un palillo, este salga limpio.
06 -
Deja que estas delicias se enfríen en la bandeja unos 5 minutos, y luego pásalas a una rejilla para que terminen de enfriarse. ¡Intenta no comértelas todas de una vez!