01 -
En un recipiente, mezcla el aceite de oliva, salsa de soja, vino tinto, salsa inglesa, mostaza a la antigua, zumo de limón, 1 diente de ajo picado, hierbas mediterráneas y pimienta negra hasta lograr una mezcla uniforme.
02 -
Haz cortes diagonales poco profundos separados por unos 2.5 cm en toda la superficie del filete. Esto ayuda a que el adobo penetre mejor. Coloca el filete en una bolsa con cierre, vierte el adobo, ciérrala bien (sacando el aire) y métela en la nevera mínimo 8 horas o toda la noche. Dale la vuelta a la bolsa de vez en cuando.
03 -
Calienta el horno a 180°C. Saca el filete del adobo y sécalo con papel absorbente. Desecha el adobo sobrante.
04 -
En la tabla de cortar, espolvorea la sal sobre el diente de ajo restante. Con la parte plana del cuchillo, aplasta y mezcla el ajo con la sal hasta formar una pasta suave. Extiéndela por toda la cara superior del filete.
05 -
Esparce la cebolla picada y el pan rallado uniformemente sobre la pasta de ajo. Luego coloca las hojas de espinaca, seguidas del queso Emmental, queso Manchego y finalmente los tomates secos. Deja aproximadamente 1 cm libre en los bordes.
06 -
Comenzando por uno de los extremos cortos, enrolla firmemente el filete como si fuera un brazo de gitano, manteniendo todo el relleno dentro. Asegura el rollo con hilo de cocina o palillos separados por unos 2.5 cm. Colócalo con la juntura hacia abajo en una fuente para horno.
07 -
Mete el rollo de carne en el horno precalentado y hornea sin tapar durante aproximadamente una hora, o hasta que un termómetro de carne insertado en el centro marque al menos 63°C para un punto medio.
08 -
Saca el rollo del horno y déjalo reposar 5-10 minutos antes de cortarlo. Esto ayuda a mantener los jugos y el relleno dentro. Quita el hilo o los palillos, luego corta en rodajas de 2.5 cm de grosor y sirve caliente.