01 -
Calienta el horno a 180°C y coloca los moldes de papel en tu bandeja para muffins
02 -
Envuelve el calabacín rallado en un paño limpio y aprieta bien para eliminar el exceso de agua. Déjalo aparte. Mantén la piel para darle color, pero si es muy grande, quítale las semillas primero
03 -
En un bol grande, mezcla la harina, canela, polvo de hornear, bicarbonato y sal hasta que estén bien combinados
04 -
En otro bol, revuelve los plátanos machacados, azúcar, huevos, aceite y vainilla hasta que todo esté bien mezclado
05 -
Vierte los ingredientes húmedos sobre los secos y revuelve justo hasta que se integren. Luego incorpora suavemente el calabacín rallado
06 -
Pon aproximadamente ⅓ de taza de masa en cada molde de papel. Hornea durante 22-26 minutos hasta que estén dorados y al pinchar con un palillo salga casi limpio
07 -
Déjalos reposar en la bandeja unos 10 minutos, luego pásalos a una rejilla para que se enfríen completamente