
Cocinar filetes en la freidora de aire puede sonar extraño, pero ha transformado totalmente mi manera de preparar carne entre semana. Después de muchas pruebas, descubrí que el calor intenso circulante crea una costra deliciosa mientras mantiene el interior jugoso, comparable a los métodos tradicionales de sartén o parrilla.
Mis dudas sobre cocinar filetes en la freidora de aire se esfumaron la primera vez que probé este método durante una noche lluviosa cuando no podía usar la parrilla. Los resultados me dejaron con la boca abierta.
Ingredientes clave y consejos de selección
- Entrecots: Busca cortes con buen veteado y grosor uniforme. La carne debe tener color rojo vivo y algo de grasa infiltrada.
- Aceite de Girasol: Su alto punto de humo lo hace perfecto para cocinar a temperaturas altas.
- Sal y Pimienta: Usa sal marina gruesa y pimienta recién molida para mejor sabor.
- Mantequilla: La mantequilla sin sal te permite controlar mejor el punto de sal final.
- Ajo fresco: Evita el ajo ya picado porque se puede quemar fácilmente.
- Perejil fresco: Añade frescura y color al plato terminado.
Instrucciones detalladas para cocinar
- Preparación del filete:
- Empieza con los filetes a temperatura ambiente para garantizar una cocción uniforme. Sécalos completamente con papel de cocina antes de sazonar. Una superficie seca es clave para conseguir esa costra perfecta. Sazona generosamente con sal y pimienta, presionando las especias sobre la carne.
- Control de temperatura:
- Precalienta bien tu freidora de aire. Este paso es fundamental para conseguir el sellado adecuado en el exterior. La cesta debe estar caliente cuando añadas los filetes para imitar el calor de una parrilla tradicional o una sartén de hierro.
- Gestión del proceso de cocción:
- Coloca los filetes en una sola capa, dejando espacio entre cada uno para que circule bien el aire. El tiempo exacto depende del punto que prefieras, pero resiste la tentación de abrir continuamente la freidora; cada vistazo libera calor valioso y afecta al tiempo de cocción.
Cuando empecé a cocinar filetes en la freidora de aire, un amigo chef experimentado me enseñó que el periodo de reposo es tan importante como el tiempo de cocción. Esos pocos minutos permiten que los jugos se redistribuyan por toda la carne.

Guía de puntos de cocción
Tras montones de pruebas, he perfeccionado los tiempos para diferentes puntos de cocción. Un termómetro de carne es tu mejor aliado aquí - para el punto medio, busca 57°C antes de dejar reposar. La temperatura subirá otros 3-5 grados durante el reposo.
Sugerencias para servir
Me encanta servir estos filetes con puré de patatas al ajo y espárragos hechos en la freidora - todo lo cual puede prepararse mientras la carne reposa. La mantequilla de ajo se derrite maravillosamente sobre el filete caliente, creando una salsa increíble.
Aprovechamiento de las sobras
Aunque el filete está mejor recién hecho, las sobras pueden transformarse en fantásticos bocadillos o ensaladas. Al recalentar, usa la freidora brevemente a temperatura más baja para evitar que se cocine demasiado.

Esta forma de hacer filetes en la freidora de aire se ha convertido en mi método de confianza para conseguir resultados de calidad restaurante en casa. Demuestra que con la técnica correcta, los electrodomésticos modernos pueden crear sabores tradicionales mientras hacen el proceso de cocina más accesible y práctico.
Preguntas Frecuentes
- → ¿Qué temperatura debe tener mi filete por dentro?
- Para término medio busca 135°F, término medio 140°F y tres cuartos 150°F. Déjalo reposar para obtener resultados más jugosos.
- → ¿Puedo usar filete congelado?
- Descongela tu filete por completo primero. La carne a temperatura ambiente se cocina más uniformemente y se dora mejor.
- → ¿Funcionan diferentes cortes de carne?
- Sí, el ribeye, filet mignon o NY strip son excelentes opciones. Solo ajusta el tiempo de cocción según el grosor.
- → ¿Cuánto duran las sobras?
- Guárdalas en la nevera por 3-4 días. Recalienta suavemente para evitar sobrecocinar la carne.
- → ¿Qué va bien con este filete?
- Prueba con patatas asadas, espárragos a la plancha o una ensalada fresca. La mantequilla de ajo también queda genial con las guarniciones.