
Estos refinados pastelitos han cautivado mi corazón con sus capas crujientes y su relleno cremoso de vainilla. Me encanta prepararlos los domingos por la mañana cuando la cocina se llena con ese aroma delicioso a vainilla. Son sorprendentemente fáciles de hacer pero quedan tan elegantes que todos piensan que vienen de una pastelería italiana.
Por qué funciona esta preparación
La magia sucede cuando la masa de hojaldre mantecosa se encuentra con la crema pastelera sedosa. Lo que más me gusta es lo accesibles que se han vuelto gracias a la masa de hojaldre de buena calidad que ya viene lista. Puedes hacerlos con anticipación y personalizar el relleno como más te guste.
Todo lo que necesitas
- Hojaldre: Yo uso uno comprado de buena calidad por comodidad, pero casero también queda maravilloso si tienes ganas de aventurarte.
- Crema pastelera de vainilla: Hecha con leche fresca, yemas, azúcar, maicena y mi parte favorita, una vaina de vainilla entera.
- Rellenos opcionales: Prueba con chocolate, pistacho o crema de limón para diferentes ocasiones.
- Barniz de huevo: Solo huevo y agua para darles ese hermoso brillo dorado.
Vamos a preparar Cannoncini
- Dale forma al hojaldre
- Estira la masa y córtala en tiras. Envuélvelas alrededor de moldes cónicos, superponiendo ligeramente para lograr esa forma clásica.
- Hornea la masa
- Píntalos con huevo batido y hornea a 190°C hasta que estén dorados y crujientes, unos 15-20 minutos. Déjalos enfriar completamente.
- Prepara la crema pastelera
- Infusiona la leche con vainilla, luego bate yemas con azúcar y maicena. Combina todo gradualmente y cocina hasta que espese y quede sedosa.
- Rellena y termina
- Cuando todo esté frío, introduce la deliciosa crema en cada pastelito con una manga.
Mis secretos de cocina
Usa siempre vainas de vainilla auténticas, el sabor no tiene comparación. Deja que las conchas de hojaldre se enfríen totalmente o tu crema se derretirá. Enfría bien la crema antes de ponerla en la manga. A veces baño los bordes en chocolate derretido o pistachos triturados para un toque extra de indulgencia.
Variaciones deliciosas
Las posibilidades con estos dulces son infinitas. Añade chocolate negro derretido a la crema para un sueño para los amantes del chocolate. La pasta de pistacho los hace extra especiales. Un poco de ralladura cítrica lo alegra todo. La crema de café los convierte en el acompañante perfecto para la tarde.

Compañeros perfectos
No hay nada como disfrutar estos con un café espresso caliente o una taza de té. Hacen que cualquier celebración se sienta más especial y lucen preciosos en una bandeja de postres. A veces los sirvo simplemente porque hacen que un día normal se sienta festivo.
Manteniéndolos frescos
Guarda las conchas vacías en un recipiente hermético por un par de días. Una vez rellenos, deben refrigerarse y es mejor comerlos dentro de las 24 horas. Evita congelarlos ya que arruina esa textura hojaldrada por la que tanto trabajamos.
Comprados vs Caseros
Aunque me encanta usar hojaldre comprado de buena calidad por comodidad, hacer el tuyo propio es un maravilloso proyecto de fin de semana. De cualquier manera, terminarás con unos pastelitos mantecosos que saben como si vinieran directamente de una pastelería italiana.
Un toque de historia
Estos pequeños cuernos tienen una historia dulce en la repostería italiana. Tradicionalmente disfrutados después de la comida dominical o durante celebraciones, se han convertido en dulces queridos en todo el mundo. Su equilibrio perfecto entre crujiente y cremoso hace que todos quieran más.
Datos curiosos
¿Sabías que cannoncini significa pequeños cañones en italiano? Es un nombre tan juguetón para estos elegantes dulces. Aunque la vainilla es tradicional, los pasteleros modernos han creado infinitas variaciones. También son populares en Malta, donde se disfrutan igual que en Italia.
Ideales para todo
Desde desayunos informales hasta celebraciones elegantes, estos pastelitos siempre se sienten especiales. Hazlos como regalo, compártelos en fiestas o simplemente date un gusto en una mañana tranquila. Su versatilidad y belleza hacen que cada ocasión sea un poco más memorable.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo preparar la crema con antelación?
- Claro, haz la crema un día antes y guárdala en la nevera. Cúbrela con film transparente pegado a la superficie para evitar que se forme una costra.
- → ¿Qué hago si no tengo moldes para los bollos?
- Puedes hacer tus propios moldes con papel de aluminio dándoles forma de cilindros. Rocíalos con aceite para evitar que se peguen.
- → ¿Cuánto tiempo se mantienen frescos los bollos rellenos?
- Es mejor comerlos el mismo día que los preparas. El hojaldre estará crujiente por unas horas después del relleno. Las conchas sin rellenar se conservan en un recipiente hermético 2 o 3 días.
- → ¿Por qué no puedo dejar sola la crema al cocinarla?
- La crema se espesa de repente y puede quemarse rápido. Remover constantemente evita grumos y te ayuda a ver cuando alcanza la consistencia adecuada.
- → ¿Puedo usar extracto de vainilla en vez de pasta de vainilla?
- Sí, pero el sabor será menos intenso. La pasta o vainilla natural dan mejor resultado y esas lindas motitas en la crema.