
Prepara en casa los sabores reconfortantes de un plato favorito de asador con Pollo Cubierto estilo Texano. Este plato incluye pechugas de pollo tiernas y sazonadas, coronadas con champiñones salteados, cebollas y queso Monterey Jack derretido. Es abundante, sabroso y perfecto para una comida satisfactoria cualquier día de la semana.
Por qué te va a encantar
El Pollo Cubierto estilo Texano es un plato fácil de hacer que mezcla sabores deliciosos y texturas ricas. Con ingredientes sencillos y un proceso directo, esta receta es ideal para días entre semana cuando quieres algo rico y especial sin mucho esfuerzo.
Ingredientes para el Pollo Cubierto
- Pechugas de Pollo: Deshuesadas, sin piel y aplastadas para una cocción uniforme.
- Sal Condimentada: Da un toque de sabor; se recomienda marca Sazonador.
- Champiñones: Los blancos o portobello pequeños son mejores por su sabor terroso.
- Cebolla Blanca: Salteada para dar dulzura y textura.
- Mantequilla: Aumenta la riqueza; puedes usar aceite de oliva si prefieres.
- Queso Monterey Jack: Cremoso y suave; queso manchego, gouda o provolone son buenas alternativas.
- Sal y Pimienta: Al gusto, para sazonar el pollo y las verduras.
Cómo preparar Pollo Cubierto
- Prepara el Pollo
- Corta las pechugas horizontalmente y aplástalas hasta un grosor uniforme. Sazona con sal condimentada y pimienta negra por ambos lados.
- Saltea las Verduras
- Calienta mantequilla en una sartén a fuego medio. Saltea las cebollas en rodajas con una pizca de sal hasta que estén blandas, luego añade los champiñones y cocina hasta que se doren. Retira y reserva.
- Cocina el Pollo
- En la misma sartén, añade mantequilla y cocina el pollo a fuego medio-alto. Dora por ambos lados hasta que esté bien cocido y la temperatura interna alcance 74°C.
- Monta y Sirve
- Cubre cada pechuga con cebollas salteadas, champiñones y queso Monterey Jack rallado. Tapa y deja que el queso se derrita. Sirve caliente con tus guarniciones favoritas.
Sugerencias para servir
Acompaña este pollo cubierto con guarniciones contundentes como puré de papas o arroz sazonado para una comida reconfortante. Para un plato más ligero, sírvelo con brócoli al vapor, zanahorias asadas con miel, o una ensalada verde crujiente. También combina perfectamente con judías verdes estilo texano para una experiencia auténtica.
Cómo guardar las sobras
Deja enfriar el pollo cubierto sobrante a temperatura ambiente y guárdalo en recipientes herméticos. Para mejores resultados, separa la cobertura del pollo antes de refrigerar. Conserva en la nevera por 3-4 días o congela el pollo (sin coberturas) hasta por 3 meses.

Consejos para recalentar
Para recalentar, añade un poco de caldo de pollo o agua a una sartén a fuego medio-bajo y calienta el pollo. Cúbrelo con los champiñones, cebollas y queso, tapa, y calienta hasta que el queso se derrita. También puedes usar el microondas al 50% de potencia en intervalos de 1 minuto hasta que esté bien caliente.
Opciones de personalización
Haz este plato a tu manera usando tu queso favorito, como manchego, gruyere o provolone. Cambia la mantequilla por aceite de oliva para una opción más ligera o añade hierbas frescas como tomillo o romero para un sabor extra. Para un toque picante, espolvorea hojuelas de chile sobre la cobertura.
Por qué destaca esta preparación
Esta receta de pollo cubierto mezcla los sabores de pollo tierno y jugoso con champiñones y cebollas sabrosas y queso derretido cremoso. Es rápida, usa ingredientes simples y ofrece una versión casera de un clásico de restaurante que a todos les encantará.
Ideal para cualquier noche
Este pollo cubierto se ha convertido en mi receta preferida tanto para cenas familiares rápidas como para recibir amigos. Esa combinación de pollo tierno, champiñones y queso derretido funciona para cualquier ocasión. Es comida reconfortante que sigue siendo lo bastante especial para invitados.
Mis secretos de cocina
Tómate tiempo para aplastar el pollo uniformemente; hace una gran diferencia en la textura. Siempre cocino mi pollo por tandas, dando a cada trozo suficiente espacio para conseguir esa costra dorada perfecta. Un queso de buena calidad recién rallado vale el esfuerzo extra; se derrite de maravilla. Recuerda sazonar mientras cocinas; crear capas de sabor hace que todo sepa mejor.
Un poco de historia
Me encanta cómo este plato tiene raíces en la cocina sureña donde realmente saben hacer brillar la comida reconfortante. Los asadores texanos lo hicieron famoso con su mezcla perfecta de champiñones, cebollas y queso, pero es muy divertido hacer tu propia versión en casa. Prueba diferentes quesos, cambia las coberturas; hazlo exactamente como le gusta a tu familia.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Por qué necesitas aplanar las pechugas de pollo?
Para que el pollo se cocine de manera uniforme. Si tienen grosores diferentes, algunas partes pueden quemarse mientras otras quedan crudas.
- → ¿Puedo usar otros tipos de queso?
Aunque el Monterey Jack da ese toque auténtico, puedes usar otros quesos que derritan bien, como mozzarella o provolone.
- → ¿Cómo saber si el pollo está listo?
El pollo debe estar completamente cocido, sin partes rosadas. Como las pechugas están delgadas, deberían estar listas tras unos 6-8 minutos de un lado y 3-4 del otro.
- → ¿Qué acompañamientos quedan bien con este pollo?
Va genial con puré de papa, verduras asadas o una ensalada. También puedes acompañarlo con arroz o brócoli al vapor.
- → ¿Puedo preparar este plato con anticipación?
Es mejor servirlo caliente y fresco, pero puedes preparar los champiñones y la cebolla antes y recalentarlos antes de servir con el pollo y el queso recién cocinados.