
Quiero compartir una de mis recetas favoritas que mezcla dos clásicos: la salsa Mississippi sin y la quiche. Está repleta de jamón, tres tipos de queso y los condimentos más increíbles. Me encanta prepararlo para desayunos de fin de semana o cuando invito amigos. ¿Lo mejor? Funciona para cualquier comida del día y todos siempre piden la receta.
Por qué se convertirá en tu favorita
Se me ocurrió esta receta cuando no podía decidir entre hacer una quiche o mi salsa Mississippi sin favorita. Créeme, combinarlas fue la mejor decisión. Tiene toda esa deliciosa cremosidad del queso que adoras en la salsa, pero en una hermosa porción de quiche. Además es súper fácil de preparar con anticipación, perfecto cuando tienes invitados.
Tu lista para el súper
- Jamón: Me gusta picarlo pequeñito para tener más en cada bocado
- Queso Manchego: Consigue uno bueno y rállalo tú mismo
- Crema agria: Hace todo extra cremoso
- Salsa Perrins: El ingrediente secreto que lo hace especial
- Condimentos: El ajo y cebolla en polvo son imprescindibles
- Huevos frescos: Son los protagonistas
- Masa de tarta: Casera o comprada, ambas van genial
Vamos a prepararla juntos
- Empieza con la masa
- Primero calienta tu horno a 190°. Extiende la masa y colócala en tu molde. Me gusta darle un prehorneado rápido de 10 minutos, así queda bien crujiente.
- Mezcla el relleno
- Ahora viene lo divertido. Bate los huevos hasta que estén esponjosos, luego añade la crema agria, la salsa Perrins y los condimentos. Incorpora el jamón y queso, ya huele increíble.
- Junta todo
- Vierte la mezcla en tu masa prehorneada. Siempre añado un poco más de queso por encima porque ¿por qué no?
- Hornea a la perfección
- Métela al horno unos 30 minutos. Sabrás que está lista cuando la parte superior esté dorada y el centro apenas cuajado. Déjala reposar unos minutos antes de cortar, todos estarán esperando.
Mis mejores consejos
- No te saltes el prehorneado: Ese horneado previo hace una gran diferencia en la masa
- Varía tus quesos: A veces uso queso de cabra o queso curado para cambiar
- Prepárala con tiempo: Queda mejor cuando se hace un día antes, los sabores se intensifican
- Añade un poco de picante: Una pizca de chile en polvo realza todos los sabores
Manteniéndola fresca
Esta quiche se conserva perfectamente en la nevera durante unos tres días. Cuando quieras disfrutarla de nuevo, caliéntala en el horno a 160° durante unos 15 minutos. El microondas también funciona, pero el horno mantiene la masa más crujiente.
Combinaciones perfectas
Me encanta servir esta quiche con una ensalada verde fresca, lo crujiente va genial con el relleno cremoso. Para el desayuno, añado algo de fruta fresca y quizás un poco de pan rústico. Es una forma tan sencilla de hacer que cualquier comida se sienta especial, incluso un almuerzo normal entre semana.

Lo que la hace tan buena
¿Sabes qué hace que esta quiche sea tan especial? Toma todo lo que nos gusta de esa cremosa y quesosa salsa Mississippi sin y lo convierte en algo que puedes comer en cualquier momento. La masa hojaldrada, el relleno jugoso y todos esos increíbles condimentos se juntan para hacer cada bocado perfecto.
Hazla a tu manera
- Cambia el queso: Prueba con queso Oaxaca o Tetilla, ambos quedan geniales
- Varía la carne: Bacon crujiente o chorizo también funcionan de maravilla
- Versión veggie: Olvídate de la carne y llénala de champiñones y espinacas
- Dále picante: Añade unos trozos de chile serrano si te atreves
- Cuida tus carbos: Hazla sin masa, sólo engrasa bien tu molde primero
Cuando tienes invitados
Me encanta preparar esto para visitas porque se ve preciosa saliendo del horno. Normalmente la hornea en mi molde de cerámica favorito y espolvoreo algunas hierbas frescas por encima antes de servir. Ponla con guarniciones coloridas y mira cómo se iluminan los ojos de todos cuando la ven.
Ideal para cualquier reunión
Esta es mi receta infalible cuando organizo un desayuno o necesito algo para una comida compartida. Es genial poder hacerla con antelación y solo calentarla cuando hace falta. Además, se transporta bien y sabe increíble tanto caliente como a temperatura ambiente. A veces hago dos porque desaparece muy rápido.
Aprovechando las sobras
¿Te quedaron sobras? Estás de suerte. Me encanta convertir las porciones en los sándwiches de desayuno más increíbles. A veces la pico y la mezclo con unas hojas verdes frescas para una ensalada rápida. O intenta desmenuzarla en una sartén con algunas verduras para un nuevo revuelto de desayuno, es espectacular.
Por qué a todos les encanta
Esta quiche simplemente acierta en todo. Ese relleno cremoso con queso, el jamón sabroso y esos condimentos intensos hacen que cada bocado sea especial. Es comida reconfortante que parece un poco elegante pero sigue siendo totalmente accesible. No es de extrañar que se haya convertido en una de mis recetas más solicitadas.
Bebidas que la acompañan
Cuando la sirvo para el desayuno, me gusta poner algunos mimosas o un vino blanco fresco. Para comidas diarias, prefiero té helado o zumo de naranja natural. Y no te olvides del café, los sabores intensos de la quiche combinan perfectamente con tu taza matutina. Se trata de hacer que cada comida sea un poco especial.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo preparar este quiche con antelación?
Claro, puedes hacerlo un día antes. Déjalo enfriar completamente, cúbrelo y refrigéralo. Caliéntalo en el horno a 160°C hasta que esté bien caliente.
- → ¿Cómo sé si el quiche está listo?
Debe estar firme al centro, con un ligero movimiento. Si insertas un cuchillo cerca del centro, debe salir limpio. Al enfriarse, terminará de cuajar.
- → ¿Puedo usar otro queso?
El cheddar aporta el sabor clásico, pero puedes optar por quesos como Gruyere o Gouda. Solo asegúrate de incluir queso crema para mantener la textura.
- → ¿Qué puedo servir con el quiche?
Este plato lleno de sabor combina bien con ensalada verde, frutas frescas o verduras asadas. ¡Perfecto para brunch o cena!
- → ¿Puedo congelar este quiche?
Sí, es posible congelarlo ya horneado hasta por 3 meses. Descongélalo en el refrigerador durante la noche y caliéntalo en el horno a 160°C hasta que esté caliente.