
Estas barras de tarta de zanahoria transforman el pastel tradicional en bocados prácticos que mantienen todas las especias cálidas y el glaseado de queso crema que tanto disfrutamos. La receta logra ese equilibrio perfecto entre bizcocho jugoso y deliciosa cobertura, convirtiéndose en mi postre favorito para todo, desde reuniones familiares hasta sesiones informales de horneado dominical.
Preparé estas barras por primera vez para la fiesta temática de jardín de mi hija, y se han convertido en el postre más solicitado de nuestra familia. Incluso mi marido, que dice que no le gusta la tarta de zanahoria, las devora sin pensarlo dos veces.
Ingredientes
- Harina común: Crea una estructura tierna perfecta sin resultar demasiado pesada
- Polvo de hornear y bicarbonato: Trabajan juntos para dar la esponjosidad adecuada
- Canela, nuez moscada y jengibre: Forman ese característico sabor cálido
- Aceite de girasol: Garantiza que las barras se mantengan jugosas durante días
- Azúcar moreno: Añade notas a caramelo y humedad que el azúcar blanco no puede dar
- Zanahorias frescas: Imprescindibles. Las bolsas ya ralladas tienen menos sabor y humedad
- Queso crema: Debe ser entero para conseguir el glaseado más cremoso
- Nueces: Aportan un maravilloso contraste de textura y grasas saludables
Instrucciones paso a paso
- Prepara tu molde:
- Forra un molde de 33x23 cm con papel de hornear dejando que sobresalga por los lados. Esto facilita mucho sacarlas y cortarlas. Una ligera capa de aceite debajo del papel ayuda a que se pegue al molde.
- Mezcla los ingredientes secos:
- Juntar primero la harina, especias, levaduras y sal asegura que se distribuyan uniformemente en la masa. Tómate tu tiempo para romper cualquier grumo, especialmente en las especias.
- Prepara la mezcla húmeda:
- Bate los aceites, azúcares, huevos y vainilla hasta que la mezcla parezca algo esponjosa, unos 2 minutos a mano o 1 minuto con batidora. La mezcla debe aclararse ligeramente.
- Combina las masas:
- Añade los ingredientes secos a los húmedos en tres tandas, mezclando solo hasta que no queden rastros de harina. Mezclar demasiado en esta etapa desarrollará gluten y hará que tus barras queden duras.
- Incorpora zanahorias y complementos:
- Usa una espátula para incorporar suavemente las zanahorias ralladas, nueces y pasas si las usas. Las zanahorias liberarán humedad durante el horneado creando esa textura característica.
- Hornea con paciencia:
- Vierte la masa en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula. Hornea hasta que el centro rebote cuando lo toques ligeramente, normalmente 25 a 30 minutos.
- Enfría por completo:
- Deja que las barras se enfríen en el molde al menos una hora. Intentar glasear barras tibias resultará en un desastre de glaseado derretido.
- Prepara el glaseado:
- Bate queso crema y mantequilla a temperatura ambiente hasta que no queden grumos antes de añadir el azúcar glas. La temperatura de tus ingredientes es crucial aquí, el queso crema frío quedará grumoso.
- Glasea con estilo:
- Aplica una generosa capa de glaseado usando una espátula, creando remolinos decorativos si lo deseas. El glaseado debe tener unos 0,6 cm de grosor.

La combinación de especias es lo que hace estas barras realmente especiales. Siempre duplico la canela en los meses fríos para un sabor extra acogedor. Mi abuela me enseñó que el verdadero secreto para una tarta de zanahoria extraordinaria es añadir una pizca de pimienta negra, que realza todas las demás especias sin ser detectable por sí sola.
Soluciones de conservación
Estas barras de tarta de zanahoria saben mejor al segundo día cuando los sabores han tenido tiempo de desarrollarse. Guárdalas en un recipiente hermético en la nevera hasta cinco días. La temperatura fría endurece el glaseado y crea una experiencia casi de tarta de queso que muchos de mis amigos prefieren a las barras recién hechas.
Para conservación más larga, puedes congelar las barras sin glasear hasta tres meses. Envuélvelas individualmente con film transparente y mételas en una bolsa de congelación. Descongélalas durante la noche en la nevera y glaséalas antes de servir para un postre que sabe recién horneado.
Sustituciones de ingredientes
Esta receta admite muchas adaptaciones según necesidades dietéticas o disponibilidad de ingredientes. Para barras sin gluten, sustituye con una mezcla de harina sin gluten 1:1 con goma xantana. Quienes evitan lácteos pueden usar sustitutos de queso crema y mantequilla vegetales en el glaseado con resultados casi idénticos.
Las verduras también pueden variarse. Prueba a sustituir hasta media taza de zanahorias por calabacín rallado en meses de verano para añadir humedad. La compota de manzana puede reemplazar la mitad del aceite para una versión más ligera sin sacrificar la textura jugosa que hace tan queridas estas barras.
Sugerencias para servir
Aunque estas barras de tarta de zanahoria son deliciosas por sí solas, pueden convertirse en un postre impresionante. Prueba a servir las barras ligeramente frías con una bola de helado de vainilla y un chorrito de salsa de caramelo para una presentación digna de restaurante.
Para reuniones de brunch, córtalas en porciones más pequeñas y sírvelas junto con fruta fresca y café. Las barras también son estupendos regalos cuando se envuelven individualmente y se presentan en una lata o caja decorativa con una tarjeta de receta escrita a mano.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo preparar las barritas con antelación?
Claro, puedes hornearlas un día antes y decorarlas con glaseado el mismo día que las sirvas. Guárdalas en el refrigerador para conservarlas frescas.
- → ¿Es posible sustituir el aceite vegetal?
Se puede reemplazar la mitad del aceite con puré de manzana sin azúcar para una opción más ligera, o usar aceite de coco derretido para darle un toque diferente.
- → ¿Qué ingredientes extra combinan bien con estas barritas?
Nueces picadas, pasas o pecanas añaden textura y sabor, pero también podrías probar con coco rallado o arándanos deshidratados para algo distinto.
- → ¿Cómo aseguro que las barritas no queden secas?
Evita sobrecocinarlas. Inserta un palillo en el centro; debe salir con unas pocas migas húmedas.
- → ¿Puedo congelar estas barritas?
Por supuesto, se conservan bien en el congelador. Congélalas sin glasear en un recipiente hermético y decóralas después de descongelarlas.
- → ¿Qué variaciones puedo intentar con el glaseado?
Añade ralladura de naranja para un toque cítrico, o una pizca de canela para un glaseado con un perfil especiado.