
Este bizcocho húmedo con un toque de especias me trae recuerdos de tardes acogedoras con mi abuela. El simple acto de remojar las frutas secas en té convierte ingredientes comunes en algo verdaderamente especial que se mantiene en perfectas condiciones durante días.
Descubrí esta receta durante un fin de semana lluvioso en el campo español. La dueña del alojamiento rural compartió conmigo su receta familiar, y desde entonces es mi consuelo culinario cuando busco algo nostálgico pero sencillo.
Ingredientes
- Té negro o verde concentrado: Crea la base de humedad y sabor sutil mientras elimina la necesidad de mantequilla o aceite
- Mezcla de frutas deshidratadas: Incluye pasas, sultanas, bayas de goji y piel de cítricos confitada para aportar dulzor natural y textura masticable. Busca variedades jugosas sin sulfitos para mejor sabor
- Azúcar moreno o panela: Aporta notas de caramelo que complementan el té. Mejor si es ecológico
- Mermelada de naranja amarga o albaricoque: Contribuye con humedad y un sutil toque cítrico
- Harina integral: Añade profundidad y valor nutricional. Tamízala para una textura más ligera
- Levadura química: Garantiza que suba bien a pesar de la densidad de la fruta
- Canela o especias mixtas: Proporciona calidez y complejidad. Usa recién molida si es posible
- Agua: Ayuda a conseguir la consistencia perfecta de la masa
Instrucciones paso a paso
- Remojo de frutas:
- Empieza preparando un té fuerte con agua hirviendo y déjalo reposar 5 minutos para máximo sabor. Viértelo sobre tu mezcla de frutas secas en un bol grande, asegurándote que todas queden cubiertas. Tapa con un plato y deja reposar sin molestar entre 4-5 horas o toda la noche sobre la encimera. Este paso crucial hidrata la fruta y la impregna con el sabor del té.
- Preparativos:
- Engrasa cuidadosamente tu molde rectangular, asegurándote que todas las esquinas queden cubiertas. Forra el fondo con papel de hornear para desmoldar fácilmente después. Precalienta el horno a exactamente 160°C, usando un termómetro para precisión ya que la temperatura adecuada es crucial para una cocción uniforme.
- Mezclado:
- Traslada las frutas remojadas junto con el líquido restante a un bol grande. Las frutas deben verse hinchadas y jugosas. Añade el azúcar y la mermelada, removiendo hasta que todo esté bien incorporado. La mezcla se verá brillante y espesa. Tamiza la harina, levadura y especias directamente sobre la mezcla para evitar grumos. Añade agua y mezcla todo con movimientos suaves hasta que no queden zonas secas. Evita mezclar demasiado para que el bizcocho no quede duro.
- Horneado:
- Vierte la masa espesa en el molde preparado, tomándote tu tiempo para empujarla hacia las esquinas y nivelar la superficie. La masa será densa y pegajosa. Hornea en la rejilla central durante exactamente 1 hora y cuarto. Comprueba si está listo insertando un palillo en el centro: debe salir limpio o con algunas migas húmedas. Deja reposar el bizcocho en el molde al menos 30 minutos antes de pasarlo a una rejilla para que se enfríe completamente.

La humilde mermelada puede parecer un pequeño detalle, pero es mi arma secreta en esta receta. Mi abuela siempre decía que las notas amargas de la naranja equilibran perfectamente el dulzor. Cuando lo preparamos juntas en Navidad, toda la casa se llena de un aroma especiado que anuncia que las fiestas han comenzado de verdad.
Sugerencias para servir
Este bizcocho tan versátil puede disfrutarse solo o con acompañamientos según la ocasión. Para el desayuno, prueba a tostar ligeramente las rebanadas y untarlas con una fina capa de mantequilla con sal. Para la merienda, sírvelo en rebanadas finas junto a una tetera de té Earl Grey. Mi familia lo disfruta especialmente con un poco de queso crema y un chorrito de miel para convertirlo en algo más sustancioso.
Consejos de conservación
El bizcocho de té mejora con el paso de los primeros días mientras los sabores se fusionan y profundizan. Guárdalo bien envuelto en papel de hornear y luego en un recipiente hermético. Mantenlo a temperatura ambiente hasta 3 días o refrigéralo hasta una semana. Para conservarlo más tiempo, corta el bizcocho completamente frío en rebanadas y coloca papel entre las piezas antes de congelarlo en un recipiente sellado. Descongela las rebanadas a temperatura ambiente o tuéstalas directamente congeladas.
Trasfondo histórico
Los bizcochos de té han sido un elemento básico en las cocinas británicas desde la época victoriana, cuando el té de la tarde se convirtió en una costumbre social de moda. Originalmente creados como una forma económica de usar el té sobrante, estos bizcochos se perfeccionaron durante el racionamiento de guerra cuando los huevos y la mantequilla escaseaban. Existen variaciones regionales por todo el Reino Unido, con Yorkshire prefiriendo una mezcla de té más oscuro y las versiones galesas a veces incluyendo puré de patata para mayor humedad.
Sustituciones de ingredientes
La belleza de esta receta está en su flexibilidad. Puedes personalizar la mezcla de frutas secas según tus preferencias o lo que tengas disponible. Arándanos secos, orejones picados, higos o dátiles funcionan de maravilla. Si evitas el azúcar refinado, el sirope de arce puro es una excelente alternativa; usa un poco menos para compensar la humedad adicional. Para sensibilidades al gluten, una buena mezcla de harina sin gluten con goma xantana funciona notablemente bien, aunque la textura será ligeramente diferente.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Qué tipo de té es mejor para este pan dulce?
El té negro fuerte, como el English Breakfast o Earl Grey, funciona muy bien. También puedes usar té verde si prefieres un sabor más suave.
- → ¿Puedo usar diferentes frutas secas?
¡Claro! Personaliza la mezcla con tus favoritas, como arándanos, cerezas o higos, junto con las pasas y sultanas.
- → ¿Cuál es la mejor forma de conservar el pan dulce fresco?
Guarda el pan en un recipiente hermético en la nevera por hasta cinco días o congélalo si necesitas más tiempo. Asegúrate de descongelarlo bien antes de servir.
- → ¿Es posible hacer este pan apto para celiacos?
Sí, solo necesitas reemplazar la harina integral por una mezcla de harinas sin gluten especial para hornear. Revisa que los demás ingredientes también sean sin gluten.
- → ¿Con qué puedo acompañar este pan dulce?
Este pan es delicioso solo, pero puedes añadirle un poco de mantequilla o mermelada para hacerlo más especial. Combínalo con una taza de té o café para disfrutarlo al máximo.